Cuba.- El gobierno cubano exigió su "inmediata exclusión" de la lista de "patrocinadores del terrorismo".
Cuba condenó que sus viajeros sean sometidos a controles estrictos de seguridad.
La cancillería afirmó en una declaración publicada en la prensa local que "la presencia de miembros de la Eta en Cuba" es un acuerdo con el gobierno de España, y que sus contactos con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc) y el Ejército de Liberación Nacional (Eln) obedecen a gestiones en procesos de paz de ese país.
"El Gobierno de los Estados Unidos no tiene derecho, ni autoridad, para inmiscuirse en estos asuntos, que en lo absoluto lo involucran, ni mucho menos afectan su seguridad nacional, como tampoco afectan la seguridad de ningún otro Estado", subrayó.
El texto responde a la afirmación del Departamento de Estado de que Cuba apoya el terrorismo y permite que "fugitivos estadounidenses residan legalmente" en la isla, por lo que fue incluida en la lista de 14 países cuyos ciudadanos y viajeros en tránsito son sujetos a control adicional.
"En nuestro territorio jamás han encontrado amparo, ni residen terroristas de ningún país.
Cuba ha ofrecido legítimamente protección y asilo político a algunos luchadores por los derechos civiles norteamericanos" y algunos de los 67 estadounidenses condenados en la isla por secuestro aéreo pidieron quedarse tras cumplir sus penas, agregó.
En ese sentido, "el gobierno cubano, con toda su moral y dignidad, condena la inclusión arbitraria de Cuba en la lista de 14 países", en vigor tras el intento de atentado en Navidad en un vuelo entre Amsterdam y Detroit, y acusó a Washington de "doble rasero" en la lucha contra el terrorismo.
La cancillería recordó que la isla fue desde 1982 incluida por el Departamento de Estado entre los países que patrocinan el terrorismo internacional, y que el año pasado el presidente Barack Obama ratificó la "absurda presencia de Cuba en esa lista".
El gobierno de Raúl Castro demandó "la inmediata exclusión de Cuba de la lista" por "constituir una designación injusta, arbitraria y políticamente motivada", que "pone en tela de juicio la seriedad de los Estados Unidos en la lucha contra" el terrorismo.
Washington y La Habana, sin relaciones diplomáticas desde 1961, tras el triunfo de
la revolución de Fidel Castro en 1959, han tenido acercamientos con la llegada de Obama al poder, pero en los últimos meses la retórica de confrontación volvió a subir de tono.
0 comentarios:
Publicar un comentario